La Escuela Superior de Hostelería de Madrid, cuna de grandes cocineros.

«Dichoso aquel que tiene una profesión que coincide con su afición». Bajo este lema, la Escuela de Hostelería y Turismo de Madrid lleva formando cocineros y hosteleros desde hace más de medio siglo. Inaugurada en 1945 –a imagen y semejanza de las mejores instituciones europeas de la época–, por esta escuela han pasado buena parte de los chefs españoles mejor valorados nacional e internacionalmente.

Pedro Subijana, Juan Mari Arzak, Paco Roncero, Alberto Chicote, Mario Sandoval, Sergio Fernández... la lista de grandes chefs que se han formado en sus aulas es extensa. Tras su estela, cientos de alumnos se matriculan cada año buscando encontrar en la hostelería y el turismo una forma de vida. Un éxito que emulan en cada uno de los concursos internacionales a los que se presentan, en los que siempre «suelen quedar los primeros».

Así lo cuenta Antonio Morales, director de esta escuela. «Hoy en día la cocina está en auge y hay muchas personas interesadas en encauzar su futuro profesional en este sector. No se trata solo de aprender a cocinar sino de descubrir las técnicas más actuales. Aquí se trabaja desde la cocina tradicional hasta la cocina de autor», explica.

Lista de espera para entrar en la escuela.

Y es que su prestigio es tal que para poder estudiar en ella hay una lista de espera de entre uno y dos años. La formación de esta escuela es eminentemente práctica y sus alumnos presumen de acceder a buenas oportunidades profesionales tras su paso por ella. «Cuanto más prácticas hagan, más formados van a salir al mundo laboral», asegura Juan Julián Fernández, Jefe de Estudios de la Escuela de Hostelería y Turismo de Madrid.